Uno de los lugares que más le gusta visitar al peque (y a nosotros) es el planetario. Le fascinan las estrellas y los planetas, quiere saber cómo se llaman las constelaciones y que es cada uno de los objetos que ve en el cielo (cosa que provoca momentos de tierra trágame). Este año, aprovechando este interés, tenemos en nuestra lista de cosas por hacer unas cuantas visitas relacionadas con la astronomía. Pero mientras llegan, para poder acercarle un poco más al mundo mágico del espacio hemos preparado estas nebulosas dentro de frascos.
Materiales
- Frascos o botellas transparentes (pueden ser de cualquier forma o medida, pero es importante que se puedan cerrar)
- Algodón
- Pinturas o colorantes
- Purpurina
- Agua
- Un palo o cuchara
Procedimiento
Lo primero que tenemos que hacer es preparar agua coloreada en varios colores, preferentemente de la gama de los morados y azules, incluso algún rosa.
Una vez listo el colorante, cogemos uno de los frascos y ponemos algodón en el fondo, apretándolo un poco con ayuda de un palito o una cuchara. Empapamos este algodón con uno de los colores que hemos preparado hasta que esté totalmente cubierto de agua.
Para la siguiente capa añadimos más algodón y seguimos añadiendo agua coloreada de otro color. Tenemos que ir rellenando todo el bote con capas: algodón, colorante, más algodón, más colorante. Entre capa y capa de algodón vamos añadiendo purpurina y removiendo un poco con el palo para repartirla bien.
Una vez que el frasco está lleno, sólo nos queda taparlo y ¡ya tenemos lista nuestra nebulosa! Se pueden hacer de diferentes tamaños y colores, añadiendo sólo purpurina o también confeti en forma de estrellas. Podemos aprovechar para hablar de las nebulosas con los peques, preguntarles si saben lo que son o cómo se forman. Es una forma divertida de acercarles un poco más al mundo de la astronomía.
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